天橋立(amanohashidate)

Hoy fui a kyoto, pero al norte. vine a acompanar a kumi a una visita a una empresa, para llegar aca hicimos 4 horas y media de camino, desde osaka, tomamos el tren express hastaque se termina la linea, y luego tomamos un tren muy viejo de un solo carro de gasolina, y luego un ferry para pasar del otro lado de la costa. en amanohashidate, hay un puente natural, que conecta las dos costas, creado por dos oleajes contrapuestos, ahi se plantaron y crecieron 3.7 km de pinos que ya tienen muchas docenas de anos. Este viaje fue inesperado, asi que no vine preparado con camara, pero les comparto un par de fotos que tome con el celular y se las explico.

Como claramente (jejeje) su nombre lo indica, amanohashidate, es el lugar donde hay un puente que se eleva hasta el cielo. lo que pasa es que si subes a la montana en el teleferico, y miras al puente de cabeza, el cielo se refleja en el agua, y entonces la formacion de arboles parece un puente que sube al cielo, pero si lo ves del otro lado de la costa, parece un dragon en vuelo que esta cayendo.

En amanohashidate, no hay grandes empresas, ni supermercados, tampoco carreteras, ni autobuses, es un pueblo muy pequeno que conserva su estilo de antano.

Se come muy rico en los pocos restaurantes que hay operados por los lugarenos, y hay dulces tipicos y frescos de la region. Yo me comi un platote de fideos soba con verduras de por ahi, con algas, hongos, cebollin, y algo que parecia y sabia a aceitunas, pero blancas.


Despues del almuerzo, compre una postal para mi familia, y me la puse a escribir en un muelle abandonadirijillo desde donde se veia la formacion de aroles, pero tambien habia un pequeno penasco donde se juntaban gaviotas y cuervos y cuando pasaba el ferry lo seguian, poruqe la gente les lanza comida desde el barquito.
este es el muelle, en cuestion. un hermoso paisaje.

Aqui me puse a escribir dos postales con un cafesito de lata que compre en una maquina cercana, pero despues se puso feo el clima, empezo a chispear y entonces hui hacia un cafe pequenito, atendido por una pareja de ancianos, donde comi muy rico un cafe y unas galletas.
En el regreso, pudimos subir a un tren casi sin paradas que va a osaka, por lo que se tarda como dos horas y media, pero sale uno cada hora o cada hora y media. asi pudimos regresar en la noche muy comodos y contando lo que nos paso ese dia.